domingo, 28 de mayo de 2017

Villamayor de Santiago 28/05/2017



Hoy en Villamayor de Santiago los toreros no sólo han tenido que lidiar a los toros, sino también al fuerte vendaval que sopló durante el festejo. Se lidió una corrida de Torreherberos/Torrehandilla, de bonitas hechuras y con el dominador común de la nobleza con la que la terna logró abrir la puerta grande. Entre Daniel Luque, Emilio Huerta y Joaquín Galdos se han repartido nada menos que seis orejas, sobre todo por la entrega y disposición de los toreros, pero también porque hubo momentos de toreo verdaderamente bueno. Tampoco podemos olvidar de la entrega y el entusiasmo del público -buenos aficionados los de Villamayor- que animaron a los toreros y pidieron con entusiasmo los trofeos. 

Es una lástima que Madrid no vio a Daniel Luque en plenitud, hoy se ha visto el gran momento que atraviesa. Estuvo suelto y relajado cuando saludo al primero de la tarde por verónicas. La faena de muleta fue extraordinaria, acarició las acometidas del toro con dulzura y temple con algunos naturales que duraron una eternidad. Tampoco faltaron los detalles personales como luquecinas y toreo por alto con dos manos. Se tiró a matar con entrega, colgando el acero en todo lo alto del morrillo y fue recompensado con las dos orejas. El cuarto no sirvió para nada pero Luque ya había hecho todo con el primero, demostrando de nuevo la clase y personalidad que pudimos ver hace poco en Temelloso. 

Emilio Huerta cortó un apéndice de cada ejemplar después de dos faenas de gran relevancia en las que exhibió su gran capacidad y concepto del toreo. Recibió al segundo de la tarde con mucha firmeza y quietud, lo que mantuvo en el inicio de faena cuando recibió al jabonero con un pase cambiado por la espalda. Aunque el toro se paró en el tercer muletazo de la serie Emilio ligo series templadas con el compás abierto en las que no exigió demasiado al toro que protestó cuando intentó bajarle la mano. Estocada y premio. Intercambió verónicas y chicuelinas en el recibo de capote al cuarto que luego toreo bien al natural. El toro vino pero sin entrega en la muleta pero el torero estuvo bien y logró obtener el segundo premio que le permitió salir a hombros. 

El peruano Joaquín Galdos estuvo muy bien con el tercero de la tarde, sobre todo en las verónicas de mucho empaque y belleza. También se lució en un quite por chicuelinas de estampa muy torera que deleitó al público. Con la muleta estuvo firme y seguro, ligando series por ambos pitones al toro que repitió pero sin bajar la cabeza ni entregarse. Fue premiado con el apéndice del animal por su buen manejo de los engaños. El sexto protestó y se frenó ante el capote, siendo también un toro violento y áspero en el último tercio. Pese a que no ofreció ninguna posibilidad de lucirse Galdos estuvo entregado y dispuesto para darlo todo. Mató con una media estocada en muy buen sitio, cortando la última oreja de la tarde. 





Imágenes de CMM. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario